Hay que hacer ejercicios físicos «a como de lugar». Mover el esqueleto va a permitirte sentirte bien. Mejora el cuerpo, el cerebro y el espíritu. Y aparte ayuda a resistir mejor los despelotes de «la diaria», de los que «complican todo el día». Tienes más tolerancia a las presiones de la vida. Si estás ejercitado, te tomas todo «con soda».
No tenemos que entrenar muchas horas y en quinta a fondo si no somos profesionales de alto rendimiento. Todo lo contrario, tiene que ser placentero. Nos tenemos que divertir y relajar con amigos porque si lo convertís en una tortura es muy posible que algún día dejes de hacerlo, y eso no es una buena opción. El deporte es salud física, espiritual y mental. Tienes que ponerle ganas y onda, y vas a lograr resultados inmediatos.
Si caminas, pedaleas o corres una hora al día vas a estar mucho más lucido el resto de la jornada. Sentirás una sensación hermosa de tener «terrible» energía. Y combate una de las grandes epidemias de este siglo: ¡el estrés!
Hacer ejercicios activa la circulación de la sangre y esto le aporta oxígeno a los músculos y al cerebro. Que necesitan aire como los pulmones. El aire es el primer signo de vida. Es una inyección natural de vida al organismo. Y tu cabeza arranca a activarse, a funcionar más y mejor, eres más inteligente, y más «vivo».
La práctica de actividad física de forma regular mejora la ansiedad, la depresión, la disfunción cognitiva, disminuye el estrés, y tiene efectos positivos sobre enfermedades neurológicas como el Parkinson y algunos tipos de demencias como la esquizofrenia.
Una combinación de ejercicios aeróbicos como caminar, trotar, correr, bicicletar, nadar, con trabajos de fuerza como pesas y aparatos para la mejora muscular, serían los más idóneos para nuestro cerebro y corazón, pero en definitiva para nuestra salud en general. Al mismo tiempo, evitan estar mucho tiempo sentado.
Beneficios físicos de la actividad física:
Mejora el funcionamiento del corazón y todo su sistema. Se vuelve más eficiente y eficaz. Disminuye el colesterol en la sangre. Baja el sobre peso. Tienes mejores formas y estás más lindo. Disminuye la presión arterial. Mejora el funcionamiento del sistema respiratorio. Disminuye la perdida de calcio en los huesos. Mejora la elasticidad pulmonar. Promueve la agilidad corporal, por eso te mueves con más elasticidad y gracia. Disminuye los efectos del envejecimiento. Mejora el tono de tus músculos. Mejora los factores de riesgo cardiovascular (corazón y vasos sanguíneos) y metabólico como la hipertensión arterial, obesidad, resistencia a la insulina, diabetes, problemas cardíacos como aterosclerosis, infarto de miocardio, enfermedad arterial, etc. Mejora hormonal y de neurotransmisores como las endorfinas, dopaminas, y adrenalina. Estimula el crecimiento de células nerviosas y la producción de proteínas. Libera endorfina y oxitocina que bloquea el miedo. Menos posibilidades de tumores cancerígenos Controla los niveles de colesterol, mejora el metabolismo de los lípidos y la oxidación de las grasas. Disminuye el estado pro inflamatorio general de muchos órganos. Disminuye el riesgo de arritmias cardiacas por control de la adrenalina y la noradrenalina. Y mejora del flujo coronario por las arterias.
Beneficios psicológicos de la actividad física:
Mejora tu autoestima. Te estimula a la iniciativa y los deseos de realizar tareas y proyectos. Te da más seguridad personal. Te da orgullo por los resultados alcanzados, vas por nuevas metas y eso te llena la agenda de actividades sanas. Mejora tu rendimiento laboral. Resuelves más y mejor los conflictos de «la diaria». Te baja la ansiedad y la tensión que puedes tener por algún problema. Te ayuda a estar en el momento presente y no todo el día con la cabeza en el futuro o en el pasado. Inclusive te la desacelera. Disminuye la fobia social. Hay gente que se pone tensa cuando hay un borbollón con muchos protagonistas. El deporte te da ese roce social que diluye todos esos miedos. La socialización que produce el propio ejercicio como hábito de vida saludable, te relaciona con otras personas, ayuda a tu integración en un grupo, evitando el aislamiento, que tan mal nos hace.
Y es mejor estar en un gimnasio, una cancha, una playa, o un parque haciendo una actividad física que perder el tiempo «con los pibes» en un baldío o en una cortada, buscando «atrincherarte» para que nadie te vea. Fumando o chupando hasta quedar petizo y bizco de loco. Y soñando con algún día ser un «ladrón de garrafas» para poder venderla. Y con esa plata comprarte algo que te «anestesie» el malestar. Solo por un momento nomás…
CHARLAS SOBRE CONSUMOS Y CONDUCTAS PROBLEMÁTICAS
